Como mujer y profesional de la salud, sé lo incómodo —y a veces angustiante— que puede ser experimentar una infección vaginal. A lo largo de los años, he visto cómo este tema sigue siendo rodeado de tabúes, vergüenza o incluso silencio. Por eso hoy quiero abrir este espacio contigo, para hablar con total confianza, desde el autocuidado y la prevención.
Reconocer los cambios en nuestro cuerpo, hablar abiertamente sobre nuestra salud íntima y compartir información con nuestras amigas, hermanas, hijas o parejas puede marcar una gran diferencia. Cuidar nuestra salud vaginal no debería ser un tema lejano ni difícil, sino una parte cotidiana de nuestro bienestar integral.
¿Cómo puedo prevenir infecciones vaginales en mi rutina diaria?
La prevención empieza en pequeños hábitos que muchas veces pasamos por alto. Aquí te comparto los más importantes que practico y recomiendo a mis pacientes:
- Higiene íntima consciente
Evita los jabones perfumados o productos agresivos. Prefiere agua y jabones neutros o específicos para la zona íntima. Recuerda: ¡menos es más!
- Ropa interior adecuada
Elige ropa interior de algodón, transpirable y evita las prendas ajustadas por largos periodos. La humedad favorece la proliferación de hongos.
- Cambia después del ejercicio
No permanezcas con ropa sudada. El sudor crea un ambiente ideal para el crecimiento de microorganismos.
- Alimentación balanceada
Sí, lo que comes también influye en tu salud vaginal. Una dieta rica en frutas, verduras y probióticos puede fortalecer tu microbiota y tu sistema inmunológico.
- Comunicación abierta en pareja
Hablar con nuestra pareja sobre molestias, síntomas o incluso prácticas sexuales es clave para una vida íntima saludable y sin prejuicios.
También es importante hablar entre nosotras
Compartir experiencias con otras mujeres, ya sea con amigas, madres o hijas, permite romper el silencio. Muchas veces, al normalizar conversaciones sobre flujo, cambios en el cuerpo o molestias recurrentes, nos damos cuenta de que no estamos solas y que pedir ayuda no es sinónimo de debilidad, sino de inteligencia emocional.
5 Preguntas frecuentes sobre infecciones vaginales
- ¿Es normal tener flujo todos los días?
Sí, siempre y cuando sea transparente o blanquecino, sin olor fuerte ni molestias. El flujo forma parte del equilibrio natural de la vagina.
- ¿Puedo tener una infección vaginal sin síntomas evidentes?
Sí. Algunas infecciones son silenciosas. Por eso es importante realizar controles ginecológicos aunque no sientas molestias.
- ¿Las infecciones vaginales se contagian sexualmente?
Algunas sí, como la tricomoniasis o infecciones por bacterias. Otras, como las por hongos, pueden aparecer por desequilibrios sin necesidad de contacto sexual.
- ¿Es recomendable hacer duchas vaginales?
No. Las duchas vaginales alteran el equilibrio natural del pH y pueden aumentar el riesgo de infecciones.
- ¿Qué hago si tengo molestias y no estoy segura de qué es?
Evita automedicarte. Agenda una cita con tu ginecóloga de confianza para evaluar correctamente lo que sucede.
El autocuidado empieza por conocerte
Mi invitación es simple: escúchate. Observa los cambios, habla de lo que sientes y no dejes que el miedo o el tabú te impidan buscar apoyo profesional. Las infecciones
vaginales son comunes, tratables y prevenibles cuando nos conectamos con nuestro cuerpo desde la curiosidad, el respeto y el amor propio.
Si este tema resonó contigo, te invito a seguir leyendo más artículos en mi blog, compartir esta información con quienes amas y, por supuesto, agendar tu cita para un acompañamiento cercano y personalizado.